Una unión para siempre: la cuestión irlandesa y las relaciones exteriores de EE. UU. En la era victoriana-

A mediados del siglo XIX, la cuestión irlandesa -la gobernanza de la isla de Irlanda- exigía atención a ambos lados del Atlántico. En A Union Forever, David Sim examina cómo los nacionalistas irlandeses y sus simpatizantes estadounidenses intentaron convencer a los legisladores y estadistas de que usaran la creciente influencia global de los Estados Unidos para lograr la independencia irlandesa. Simultáneamente, rastrea cómo los políticos estadounidenses utilizaron la cuestión irlandesa como medio para promover sus propios fines diplomáticos y políticos. Al combinar una innovadora metodología transnacional con atención a las complejidades del arte de gobernar estadounidense, Sim reescribe la historia diplomática de este tema olvidado. Considera el impacto que los actores no estatales tuvieron en los asuntos formales entre los Estados Unidos y Gran Bretaña, descubriendo que los nacionalistas irlandeses no solo no involucraron a los Estados Unidos en su causa, sino que realmente fomentaron un acercamiento angloamericano en el último tercio del siglo XIX . Sus fracasos les llevaron a buscar nuevos medios para promover la autodeterminación irlandesa, incluida una estrategia revolucionaria más radical que alteraría el curso de la historia irlandesa y británica durante el próximo siglo.