Todo lo que quiero-

Estoy parado aquí en completa oscuridad. La estática llena mis oídos y todo lo que oigo es el sonido amortiguado de los gritos de la multitud. Puedo escuchar mi propio corazón latiendo en mis oídos. No sé si reír, gritar, llorar, gritar o incluso vomitar. Estoy completamente congelado. Todo se desarrolla a mi alrededor y sé que es hora. El pánico dentro de mí se desvanece lentamente y la adrenalina comienza a bombear sangre caliente por mis venas. En lugar de sentirme débil, comienzo a sentirme fuerte. Mirando por encima de mi hombro, lo veo. Tristan. Él me está mirando atentamente. Tristan es la miseria que anhelo. Probablemente esté esperando a que lo arruine. Sí, estoy nervioso como el infierno, pero no lo dejaré ver, ni me alimentaré de él. No . . . esta vez lo mataré de hambre, y mostraré a todos aquí lo que puedo hacer. La sombra de mi sonrisa libera el último miedo. Lo miro de nuevo una vez más. Él todavía está parado allí, como una estatua. Caminando hacia el borde, ahora sé lo que puede romperlo. Esta noche, arriesgaré todo ...