Paz por pieza- Tessa

Me quedé mirándolo en una mezcla de sorpresa, miedo y vergüenza. ¿Qué estaba haciendo él en el nombre de Dios? Comprendí que estaba acostado en su potencial cama de muerte en el hospital. Pero no podía creer que él tuviera el coraje de traer el pasado después de todos estos años, especialmente delante de mi madre (sin ser específico). Pensé que estaba obviamente fuera de su mente debido a la morfina en la que estaba. Él sentía la necesidad de pedir mi perdón, confesar sus pecados a Dios y rezar para que aún tuviera la oportunidad de entrar en el Cielo. En mi mente, de acuerdo con la Oración del Señor, si no perdono a los que han pecado contra A mí, Dios no me perdone el mío. ¡Y yo ni siquiera consideraría jugar con mi eternidad o con Dios! Bien, le dije que le perdoné (por él o por mí?). Pero confía en mí, nunca olvidaré ni perdonaré sus acciones ... nunca.