Dañado-

Era fácil amar a Kat. No sabía que era lo que era al principio. Sabía que la quería, que no me detendría ante nada para tenerla en mi cama. Arruinarla de la mejor manera que sabía y asegurarme de que fuera mía y solo mía. Tomarla era una cosa, pero debería haberlo sabido antes que pensar que un hombre como yo pudiera aferrarse a una mujer como ella. No hay mucho que pueda esconder y tanto que pueda correr, antes que el pasado y mis pecados me atrapen. Y ahora es demasiado tarde. Ella no puede saber la verdad; nadie puede. Ella es mía en todos los sentidos y me niego a dejarla ir. Pero no sé cuánto más puede tomar antes de que su amor se convierta en odio.